Hoy una «media» receta, ya que vamos a explicar cómo podemos hacer que nuestros tomates tengan una vida más larga y además estén buenísimos. Solo necesitas tomates, pimienta y un AVOE. También com ya sabréis, en la tienda contamos con el aceite de oliva presentado en frio de edición limitada. ¡Os dejamos con la receta!

Ingredientes:

  • 200 gramos de tomates secos
  • Aceite de oliva virgen extra
  • Pimienta negra en grano
  • Guindilla cayena (al gusto)
  • Orégano

Preparación:

  1. En un cazo ponemos agua a calentar y justo cuando va a romper a hervir la retiramos. Añadimos los tomates secos y los dejamos unos 20 minutos para que se hidraten.
  2. Pasado ese tiempo los sacamos, los escurrimos y los secamos con papel de cocina.
  3. En un bote de vidrio (previamente esterilizado en agua hirviendo) vamos añadiendo los ingredientes al gusto. Nosotros echamos primero una capa de tomates secos, una cucharada de orégano, un puñadito de pimienta negra en grano y otro de guindillas cayenas, cubrimos con aceite y volvemos a repetir la operación hasta terminar con todos los tomates secos. Si le añadís más pimienta y guindilla saldrá más fuerte, id probando hasta que le cojáis el punto y sea de vuestro agrado, a nosotros nos gusta que tenga mucho sabor, así que le echamos bastante. También podéis añadirle otros ingredientes como ajo, cualquier otra hierba (albahaca, tomillo, etc.) o lo que se os ocurra. Es importante que los ingredientes queden completamente cubiertos por el aceite, ya que si no podría salir moho.
  4. Dejamos el bote a temperatura ambiente al menos una semana, aunque lo ideal es esperar dos, así tendrá más sabor.

Ya tenemos conversa para este invierno y podremos disfrutarlos a lo largo de los meses. Para toda la familia si os gusta el picante y sino poned un poco menos de Cayena y LISTO. Esperamos vuestras reseñas y en que lo habéis utilizado.

Un abrazo y a por octubre !!